Y de repente, sin motivo
alguno, mientras estoy trabajando debo parar.
Viene a mi cabeza un pensamiento
de esos que inevitablemente te dejan media congelada. La neurona se
manda su lumbrerazo y me doy cuenta de algo…soy muy feliz! Creo que hace años
no tenia esta sensación, de sentirse plena, pero no por personas o acontecimientos,
sino feliz por mi y la vida que tengo.
La pega está bien, los colegas también. Mi familia esta sana y tranquila. Mis
amigos sonríen felices y sin problemas, mis necesidades están más que
satisfechas y me está gustando quien soy. Mi mundo y quienes lo conforman están
plenos.
No sé el motivo por el que
escribo…bueno, en realidad dar gracias y decir lo bueno al mundo, no esta de más
Sonrisa gorda como digo yo.Sonrisa gorda es lo que tengo.