Hoy una amiga encontró en Fb una
foto de 6 años atrás. La foto es increíblemente
linda, con la Vane, Caro y Dupre, todos muy ebrios, weviando en Plaza Perú.
Lo notable de la foto, aparte de
mi juventud, es el hecho de que ese día estaba ad portas de la cortada de
venas. El hombre del momento, Rodrigo, había terminado conmigo y yo creía que
el mundo se terminaba y moriría de dolor.
Sin embargo, no fue así. Nunca es así. La vida pasa, siempre para mejor.
Al final, siempre vemos que todo lo vivido nos lleva a cosas que no
necesariamente son ultra felices, pero cosas que necesitamos para ir conociéndonos
y saber quiénes somos.
Me
encanta dormir con él. Me encanta vivir nuestras
vidas separadas y tan juntas. Mirarnos y
romper el hielo, regalarnos un te quiero luego de hacer el amor o simplemente después
de atendernos.
Adoro
despertar y sentir que está ahí, que ante cualquier cambio de movimiento del
otro, nos adaptamos en nuestros abrazos, en esa pequeña cama. Como no adorar
que me pida un último regaloneo antes de partir a trabajar mientras tomo mi café.
Siento
un poco de miedo, pero dicen que solo los valientes lo sentimos. Vale la pena
el riesgo, aprender a adaptarnos a estos nuevos tu y yo es mi proyecto personal
más importante. Y estoy infinitamente feliz con ello.
Sonrisa
ultra mega gorda. De esa tengo ahora en la cara.
Aunque intente varias veces
pasar por alto lo que siento y no dar más vuelta a lo que pasa, días como ayer
son los que me hacen denotar que junto a nadie la vida había sido tan divertida
y hermosa.
Te quiero, como solo tú y yo
lo sabemos. Con abrazos, con sonrisas, bailes en la cama, siestas, películas,
almuerzos y ridiculeces. Así te quiero. Así somos felices.
Ya que fue el día de los
enamorados y hace 10 años no pasaba unos
de estos días sola, amerita el post. Siempre he pensado en canciones que
representen en mi memoria a esos caballeros que han acompañado mi humanidad
todo este periodo. Podrían ser las canciones del desamor, pero no.
Independiente de los desenlaces y cosas varias que hubiesen acontecido, estas
canciones representan los momentos
compartimos, los momentos que hicieron que me enamorara de ellos y llegaran a
ser personas importantes en mi vida
Milton. Ese primer pololo
Santiaguino, hermano de Max (si, tuve como Lolo al hermano de mi primer amor), lleno
de ilusiones y de locuras, ese hombre bueno con el cual pasábamos veranos e
inviernos completos en su casa de Maitencillo, ese Lolo con el que nos
esforzamos por que una relación a
distancia podía ser duradera y feliz. Ese hombre con el que la palabra “jugados”
fue verbo.
Rodrigo. Ese hombre que
hasta el día de hoy y quizás por las piscolas que tengo en el cuerpo, puedo
decir fue el amor de mi vida. Ese hombre
10 años mayor que yo con quien dibuje una vida, me soñé por primera vez madre.
Ese hombre grande que siempre lamentaré haber conocido tan pendeja, tan
universitaria. Ese hombre que compartía
mi forma de ver la vida y lo que yo deseaba de ella. Ese hombre con
quien soñé una vida completa, al lado de una niñita que él imaginaba igual a mí.
El, esa vida llena de Historia y música, con preguntas jurídicas y admiración
el uno al otro ,con una librería y una casa lejos de Santiago.
Alberto. Ufff, que puedo
decir de Pelao. Ese hombre que llego para olvidar a Rodrigo. Ese hombre que me
aguanto durante todo mi examen de grado, ese hombre a quien siempre super no estaría
mucho tiempo .A ese hombre que una vez aprobado el grado, supe que tenía que
patear.
José Esteban.Él fue probablemente el hombre más importante
de mi vida adulta. Me vine a Santiago y a las dos semanas ya iniciamos algo. Él
fue el hombre más real que tuve en mi vida. Vivimos juntos, intentamos
construir tantas cosas. De él fueron muchas las cosas que me gustaban. Ambos compartíamos
oficio, admiraba su pasión por el
Derecho y el modo en que nuestras conversaciones podían llegar a puntos de
vista infinitos. Él fue el hombre con quien más cosas en común compartí, era la
música, el modo de planificar la vida y otras tantas cosas. Lamentablemente, mi
locura y otras cargas de él hicieron que no resultará. Siempre me pregunto por
qué el no fue más chico y yo más grande…pero bueno.
Francisco. Mi Panchi panchi.
Ese hombre que me siguió y me siguió. Ese hombre que conocí en un momento duro .
Ese hombre que se ganó mi corazón a punta de esfuerzo. Ese hombre tan distinto
a mi, tan sano y feliz. Esta es una historia extraña, aun abierta. El me enseño
a vivir la vida, a meterme en el culo a todos y seguir, a ver que realmente el
problema estaba en mi y no en los otros, en tomar una terapia real que ha
llevado mi vida a un estado de felicidad que no conocía.El fue el primer paso a ser feliz.
Algunos días, parece que la
vidase apesta de verte bien y envía un
acumulado de pequeña mierda, toda junta, para que recuerdes que las cosas no
son na´ tan simples como vienen dándose
A eso sumemos el hecho de
que tener a mi mamá por más de 3 días en casa me agota, el calor me tiene ñata
y lo que se suponía sería un febrero relajado que dejo de serlo por la eliminación
del feriado judicial.
Pequeña mierda, que hace
gran mierda y me tiene al borde de las lágrimas con pataleta incluida.